Facebook está muerto (Solo aún no lo sabe)
Facebook está muerto (Solo aún no lo sabe)
La compañía de más de $750 mil millones de dólares aún tiene opciones, pero ninguna termina bien
La compañía de más de $750 mil millones de dólares aún tiene opciones, pero ninguna termina bien
Tuve un momento extraño la semana pasada que me ayudó a darme cuenta que Facebook — la red social que he usado por más de una década — está a punto de extinguirse. Y como un pájaro dodo y una paloma mensajera, probablemente no lo ve venir.
Tengo el privilegio de enseñar en la escuela dominical cada semana (vía Zoom) a un grupo fantástico de adolescentes de entre 14–16 años. Todos ellos son nativos tecnológicos con un alto conocimiento cultural, un fuerte desagrado por cualquier cosa que viole su privacidad, y una nariz para tonterías políticas.
Naturalmente, ninguno de ellos tiene Facebook.
Pregunté si alguno de sus amigos tenía. Se rieron. Ni uno solo de ellos pudo pensar en amigos que todavía tuvieran Facebook. Uno de los chicos me comentó: “Amigo… Facebook es para mamás y abuelos.”
En verdad, la realidad de Facebook es, de hecho, mucho peor. El monopolio megalítico de las redes sociales enfrenta cinco desafíos potencialmente insuperables en los próximos años.
1. A la Gen Z no le importa
Los menores de 18 han cambiado a: Tik Tok, Snap. Quizás IG. Quieren cifrado de extremo-a-extremo, no quieren ser rastreados, tienen miedo al bullying en línea y al discurso de odio, y no les gustan los anuncios.
Sobre todo, no les gusta estar en la misma red social que sus mamás, papás, tías, tíos y abuelos.
Para ser claro, Facebook sigue siendo el líder entre los menores de 17, pero no hay manera que mantengan esa ventaja por mucho tiempo. De hecho, ya hay 2.6% menos adolescentes en el sitio comparado con el segundo trimestre de 2019.
Facebook potencialmente podría implementar un tipo de Facebook-solo-para-menores-de-18, pero los niños probablemente, de todos modos, no lo usarían.
Imagen: cambio en el uso mensual Estadounidense de Facebook, por grupo de edad.
2. Los millennials están listos para abandonarlo
Más y más de mis amigos están cortando el cordón azul rey, especialmente después de ver El dilema de las redes sociales, o leer libros reveladores como ¿Qué está haciendo Internet con nuestras mentes? Superficiales, Irresistible, Enganchado, o Digital Minimalism.
Porque, enfrentémoslo: Facebook es una máquina de odio, el tipo de lugar donde el contenido negativo se hace viral mucho más que el positivo. En consecuencia, los Millennials, cada vez más conscientes, se están volviendo cautelosos.
Además, ahora son oficialmente demasiado viejos para discutir con extraños y conocidos en línea, no están interesados en que su estado de ánimo sea manipulado, no tienen cincuenta minutos para desperdiciar en Facebook cada día, y ellos pueden enviar de forma segura las fotos de su hijo/perro/cena directamente a sus amigos y padres sin la aplicación que Zuck construyó.
¿Además? Están descubriendo que no necesitan redes sociales para ser sociales. Ellos aún recuerdan esos hermosos días de amistades analógicas, y una vez que haya una vacuna para el COVID, esperen verlos hacer el arduo trabajo de construir relaciones reales en lugar de digi-conecciones.
Con todo esto dicho, esperen que los Millennials abandonen Facebook en grandes cantidades tan pronto como surja un contendiente viable.
Mientras tanto, muchos más Millennials harán lo que yo he hecho: instalar una app que los aleje de las distracciones de Facebook para matar la adición de scrollear, después instalar un bloqueador de contenido y de rastreadores para eliminar todos los anuncios y el rastreo.
Eso los dejará con Messenger y la habilidad de ocasionalmente visitar el muro de un amigo cuando la necesidad surja. Para ese punto, ya tendrán un pie afuera de la puerta.
3. La derecha pronto saldrá en masa.
Creo que la verdad nunca debería ser censurada. No en Occidente, no en China, no en Rusia. He pasado cinco días en la totalitaria Corea del Norte — — es un lugar construido en base a mentiras y estoy convencido que solo la verdad nos puede liberar.
Sin embargo, las plataformas de redes sociales han empezado a “censurar” mentiras comprobables, falsedades patentadas, evidentes desorientaciones, y noticias creadas a través de granjas de clics con el propósito de fomentar la desunión en occidente. La verdad nunca debe ser censurada, pero debemos estar atentos contra mentiras notorias y verificables como “la tierra es plana”, “las vacunas matan bebes”, y “Hilary Clinton dirige una red de abuso sexual infantil bajo una pizzería”
Este sentimiento enfurece a la gente de extrema derecha — — porque, después de todo, ¿Quién puede determinar que es la “verdad”? Y solo es cuestión de tiempo antes de que decenas de millones de ultra-conservadores dejen Facebook por una nueva plataforma de redes sociales que respete su derecho a ser engañado.
De hecho, ya existe una nueva plataforma de redes sociales que ha alcanzado el número 1 en la App Store: Parler, la llamada “Red social del discurso libre”. (No señalaremos la ironía de usar una palabra extranjera para discutir mantener fuera a los extranjeros.)
4. También la Izquierda
Además del abandono de Facebook de la extrema derecha por su propia cara de eco, esperen ver a la extrema izquierda, hacer lo mismo. Después de todo, es sensato demandar igualdad de ingresos mientras usan una plataforma que enriquece a un 36 añero con un valor neto mayor de $100 mil millones de dls?
Con algo de suerte, ambos grupos de extremistas se refugiarán en sus cámaras de eco y dejaran al resto de nosotros regresar el mundo fuera de línea a un lugar de discurso civil, respetuoso y altamente productivo.
Imagen: [¿Cómo ha cambiado el uso de Facebook en los últimos dos años?
azul: Menos frecuentemente, naranja: no ha cambiado, gris: más frequentemente, amarillo: no estoy seguro]
5. No valdrá la pena mantener lo que queda
La generación Z, los Millennials, la extrema izquierda, la extrema derecha, todos abandonarán Facebook, y ¿qué queda? Un medio aburrido y presuntuoso. Creadores de contenido de vanguardia, casi nulos. La base de usuarios será un montón de sesenteros no políticos a quienes les gustan las fotos de gatos y videos de perros bailando, además de algunos trolls con mucho tiempo en sus pegajosas manos.
¿Pensaste que Myspace era malo? En 5 años, Facebook podría ser el lugar más deprimente de Internet.
Entonces ¿Qué puede hacer Facebook?
Tienen opciones:
Inclinarse por su grupo demográfico con crecimiento más rápido: personas de la tercera edad. No es sexy, pero rayos ¿ha visto por cuánto los anuncios de Viagra se venden? Obviamente, no hay nada malo con satisfacer a los Baby Boomers, pero nuestra sociedad obsesionada con la juventud ya no los verá como la plataforma principal si lo hacen.
Apoyarse en teorías de conspiración, anzuelo de clicks y arruinar el mundo.
Invertir una tonelada de dinero tratando de convencer a la siguiente generación que Facebook sigue siendo el chico cool de la cuadra, a pesar de su plataforma envejecida y las serias preocupaciones de privacidad.
Seguir adquiriendo verdaderos innovadores como Instagram y WhatsApp (por ejemplo Tik Tok). Esto ciertamente funcionará a corto plazo… hasta que un bombardeo de demandas antimonopolio las rompa a todas de nuevo.
Todo esto lleva al inevitable colapso de Facebook.
¡Eso es Imposible!
No, no lo es. Si bien Facebook no va a desaparecer pronto — todavía tiene más de dos mil millones de usuarios activos diarios — si Myspace nos enseñó algo, es que cuando el sitio de redes sociales más grande del mundo se derrumba, lo hace de la noche a la mañana
Es el efecto de red pero en reversa.
Para aquellos no familiarizados con la Ley de Metcalfe, la teoría sostiene que “el valor de una red de telecomunicación aumenta proporcionalmente al cuadrado del número de usuarios del sistema”. A medida que el costo físico de la red crece linealmente, su valor crece exponencialmente.
Asignemos a cada persona en una red social el valor de $1.50 dls. Una red de dos personas vale $2.25 dls ($1.50 x $1.50). Una red de tres personas no vale $3.00 dls. — vale $3.375. La red de Facebook de dos mil millones de usuarios actualmente vale $750,000,000,000 de dólares
Somos nosotros, los usuarios, quienes le damos a Facebook el 100% de su valor. La realidad es que cuando mis 8 amigos más cercanos abandonan Facebook o cambian de plataformas, no volveré a entrar jamás.
Mientras la desaparición de Facebook puede tomar más tiempo que la de otros debido a su enorme tamaño — y, como Myspace, seguramente seguirá existiendo por décadas de alguna forma — es seguro decir que sus mejores días están en el pasado. Porque es solo cuestión de tiempo antes que el efecto de red se rompa.
Buenas noticias: Las oportunidades abundan
Al final, la desaparición de Facebook, de hecho, será muy buena noticia para comercializadores, emprendedores, usuarios de redes sociales y el público en general.
Para comercializadores, más plataformas de redes sociales generarán más opciones de marketing, con audiencias específicas y menos competencia de anuncios.
Para emprendedores, existe la oportunidad de construir aplicaciones auténticas, elegantes e innovadoras que compitan con Facebook por primera vez en una década. Así como la sociedad de consumo individual crece, espera ver una proliferación de sitios para grupos específicos en los años próximos. (Y, quizás irónicamente, algún tipo de sitio maestro para acceder a todos ellos desde una sola aplicación.)
Para usuarios de redes sociales, esperen (o exijan) ver en uso la Carta de Derechos de los Usuarios (User’s Bill of Rights), incluyendo estándares de privacidad reforzados, algoritmos mucho menos adictivos, protección innovadora contra trolls de internet, y división de ganancias por anuncios…. vayan a Medium! Es nuestra presencia y creación de contenido lo que da a todas estas plataformas tanto su poder como sus ganancias, y ya es el momento de que nos comiencen a tratar más como clientes y contribuidores y menos como el producto a vender.
Para el público en general, esparcir nuestras interacciones digitales a través de un conjunto de sitios más amplio podría resultar en una mejor protección de nuestra información, algunas armas inventivas en la lucha contra la interferencia extranjera que socava la democracia y el discurso civil, y un ecosistema no monopolizado de diversas plataformas desde las que expresar verdades reales sin censura.
Quizás podamos arreglar esto después de todo.
ACTUALIZACIÓN:
Unos días después de publicar esta historia, Jared fue repentina y misteriosamente incapaz de acceder al panel de su Facebook Fanpage. Estuvo inactivo durante más de una semana y sigue cayendo misteriosamente durante algunos días.
Por favor, sigue a Jared en Medium para obtener más información.
El nuevo panel de Facebook de Jared. :-)
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